La prisión de la libertad de Michael Ende
Es corto el pasillo del imponente palazzo romano pero jamás alcanzaremos su final. Es ancho el zaguán de la villa magnífica, y ahí lo tenemos, invitándonos a entrar, engañándonos con una oferta de facilidad. Si te lanzas al mundo para aprender la admiración, ¿adónde debes dirigirte?. Los cuentos de Michael Ende demuestran que existe la libertad y que la fantasía es nuestro mejor rescate. La prisión de la libertad secuestra al lector y se lo lleva a un mundo de colores abigarrados, de enigmas y milagros y señales misteriosas.